Introducción a los Equipos de Etiquetado Automático 888

Equipo de etiquetado automático. Detalle de rodillo de la 729ns

Utilizando una definición simplificada, un equipo de etiquetado automático es una máquina que dispensa una etiqueta y la aplica en un producto, envase o empaque. Es una máquina que, entre otros que detallaremos más adelante, incorpora un sistema para desprender la etiqueta del soporte, dejándola libre para aplicarla al producto.

La primera y más sencilla clasificación en función de su aplicación distingue dos tipos de máquinas de etiquetado automático, las de sólo aplicado y las de impresión y aplicado, también conocidas por su definición en inglés, Print & Apply. La elección de una u otra dependerá del propósito del etiquetado.

Los equipos de sólo aplicado o Aplicadores Automáticos utilizan etiquetas pre-impresas y los usos más característicos son las siguientes:

 

  1. Decoración primaria del producto, paquete o envase.
  2. Etiquetado promocional.
  3. Etiquetado de seguridad o evidencia de manipulación.
  4. Etiquetado para evitar el robo o la falsificación.
  5. Información y visualización del producto o de sus características.

 

En el caso de los equipos Print & Apply o de impresión y aplicado, la impresión de la etiqueta es realizada por el etiquetador para posteriormente aplicarla en el producto. estos equipos se asocian generalmente con la codificación de barras. Los propósitos más usuales para la utilización de estos equipos son los siguientes:

 

  1. Identificación/seguimiento del producto o paquete, usualmente asociado a movimientos logísticos de distribución y almacenamiento.
  2. Impresión de información variable, como ingredientes de un producto, información nutricional, pesos, fechas de caducidad, etc.
  3. Reducción del inventario de etiquetas pre-impresas. Permite imprimir a medida de la necesidad.
  4. Decoración primaria del producto o envase. A medida que la tecnología avanza se está convirtiendo en una aplicación cada vez más viable con máquinas cada vez más rápidas y con una impresión de mayor resolución.

 

Existen muchos tipos de aplicadores y ello conlleva que hay diferentes clasificaciones, pero todos tienen un punto en común, un sistema de separación de la etiqueta de su papel soporte o de respaldo. Esto se logra desenrollando una bobina de etiquetas troqueladas y tirando del papel soporte alrededor de una pletina o separador con un ángulo concreto. A media que el papel soporte avanza alrededor del ángulo cerrado de la pletina, el borde delantero de la etiqueta se desprende. Las placas separadoras se pueden encontrar en varias configuraciones, por ejemplo, pletina fija, móvil, neumática, etc.

Las pletinas separadoras rígidas se pueden utilizar en productos muy uniformes, mientras que las pletinas con resorte se utilizan en aplicaciones de forma lateral. con las pletinas separadoras móviles activadas por solenoides o por sistemas neumáticos, se pueden colocar etiquetas de manera precisa en partes hundidas de un envase en el punto que se requiera. Las pletinas separadoras eléctricas se deben controlar de forma muy precisa con temporizadores electrónicos de modo que la etiqueta dispensada previamente se mantenga en contacto con el producto durante el tiempo necesario para su adhesión al mismo.

Una vez que las etiquetas se ha separado del papel soporte, existen varias formas de acercarlas y aplicarlas en la ubicación correcta sobre el producto que se desee etiquetar. La efectividad de la operación de etiquetado viene determinada por la aplicación de presión de forma uniforme a la etiqueta, con la finalidad de garantizar un contacto efectivo del adhesivo con la superficie del producto a etiquetar.

Entre los distintos métodos de aplicación de presión para asegurar la correcta adhesión de la etiqueta al producto se encuentran las almohadillas de presión, los pistones neumáticos, soplado, anillos grafilados o cepillos rotativos. De la misma forma se debe sujetar la etiqueta en posición en una caja, pletina o tambor al vacío que se desprende hacia el producto cuando se encuentre en la posición correcta.

 

Aplicadores con rodillo o tambor.

La forma más utilizada de fijar la etiqueta al producto consiste en la utilización de rodillos de caucho o espuma y dispositivos de aplicación de tambor, en ocasiones con cepillos adicionales. Estos sistemas son los mejores para la colocación de etiquetas en paquetes planos o cilíndricos, también se utiliza para etiquetar superficies cóncavas o convexas.

Habitualmente se coloca el cabezal en posición vertical encima del paso del producto pero existen otras posibilidades. Si se utilizan dos cabezales de aplicación, se pueden colocar simultáneamente etiquetas en la parte superior y en la inferior de un mismo objeto. Si el cabezal aplicador se coloca en horizontal se pueden colocar etiquetas en los laterales del producto. Colocando dos aplicadores enfrentados a ambos lados de la línea de transporte del producto se pueden etiquetar dos lados al mismo tiempo.

Con otros sistemas es factible aplicar etiquetas en las esquinas de las cajas a doble cara, como por ejemplo etiquetas de garantía o de precinto en medicamentos o productos de alimentación. Así mismo, se pueden utilizar rodillos de aluminio para etiquetar paquetes con superficies dispares o flexibles. También la utilización de rodillos motorizados que sirven para acomodar las etiquetas en áreas difíciles.

 

Aplicadores con almohadillas de presión o pistones neumáticos.

En algunos métodos de aplicado se utilizan almohadillas o pistones para colocar las etiquetas en su lugar. En estos casos las etiquetas una vez dispensadas se succionan hacia una almohadilla al vacío en el extremo de, por ejemplo, un pistón para luego aplicarse al objeto cuando se encuentra en la posición correcta, momento en el que libera la succión, con lo que se consigue un etiquetado de alta precisión.

Con estos sistemas se puede colocar una etiqueta en cualquier superficie, dirección o ángulo, superior o inferior. En función del recorrido del pistón, se pueden colocar etiquetas en depresiones del producto o incluso en el fondo de objetos (por ejemplo, vasos).

 

Aplicadores con inyección de aire o soplado.

Otro de los métodos más comunes de aplicación es el que utiliza el soplado con presión de aire. El sistema recoge la etiqueta una vez dispensada con una ligera succión y la sopla lanzándola hacia el producto.

Este sistema se utiliza cuando se requiere aplicar etiquetas sobre superficies que no sería posible con los sistemas anteriormente comentados y para cuando es necesario colocar una etiqueta en productos delicados o que no puedas tener contacto con el aplicador (por ejemplo, frutas delicadas)

Una variación de este sistema es la que el cabezal aplicador se encuentra incorporada a un brazo mecánico que luego puede colocar la etiqueta mediante el chorro de aire.

Por último, en este apartado de introducción a los aplicadores automáticos, no podemos olvidar una parte importante, como es el control de etiquetas y/o productos que se pueden colocar en los aplicadores para asegurarse que las etiquetas se han colocado de forma precisa y consistente.

Para ello se puede añadir al aplicador diferentes dispositivos de captura, lectura o rastreo de etiquetas, datos o productos. Los dispositivos de captura de datos rastrean el espacio entre etiquetas individuales troqueladas e interrumpen la alimentación de la banda al final de cada etiqueta. Esto, reinicia el sistema hasta que reciba la siguiente señal de rastreo de productos (Fotocélulas, lectores, micro-interruptores). Todos estos dispositivos se pueden colocar en el aplicador o en la banda de transporte par detectar etiquetas faltantes, final del rollo de etiquetas o roturas en el rollo de etiquetas.

En la mayoría de los aplicadores, el el propio objeto o producto el que activa el aplicado de la etiqueta a través de fotocélulas de rastreo o control de los productos. Realizarlo de esta manera permite que si el flujo de productos es irregular o desigual, el aplicador puede compensarlo de forma automática y aplica únicamente la etiqueta requerida.

Los aplicadores de etiquetas utilizan diversas tecnologías de detección en función de los objetos a etiquetar, fotocélulas con espejos reflectores (para envases transparentes, por ejemplo), receptores e interruptores de proximidad hasta lectores de colores o zonas. En el caso de aplicadores semiautomáticos estos interruptores pueden ser de accionamiento por parte del usuario (por ejemplo, mediante pedal o manualmente)

Consulte con los especialistas de Labelfactory para elegir el equipo de etiquetado que mejor se adapte a sus necesidades.